La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) lidera la respuesta ante la crisis del Acuartelamiento de Torrelaguna con hechos y gestión, no solo con palabras. Frente al desamparo que sufren las familias desalojadas, AUGC confirma que lleva días manteniendo contactos discretos y directos con el Alcalde de la localidad y representantes parlamentarios. El objetivo es doble: asegurar un realojo digno inmediato y frenar lo que tememos sea una reestructuración encubierta de la seguridad en la Sierra Norte. Pero esta crisis tiene responsables. AUGC hace hoy pública la documentación que demuestra que el Ministerio del Interior conocía el riesgo. El 18 de marzo de 2024, nuestros servicios jurídicos denunciaron formalmente la falta de mantenimiento y el abuso de «obras de emergencia» por riesgo de derrumbe. Solicitamos una revisión total de infraestructuras que habría evitado el colapso de Torrelaguna. ¿La respuesta de la Administración el 5 de abril? Archivar la queja sin actuar. «No estamos improvisando. AUGC avisó hace año y medio del peligro, y ahora que el daño está hecho, somos los que estamos sentados con el Ayuntamiento buscando soluciones habitacionales y exigiendo que se construya de una vez en los terrenos cedidos desde 2019», afirman desde la organización. Exigimos responsabilidad política por la inacción y soluciones técnicas inmediatas.


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